Hay atletas que compiten contra otros, y luego está Armand “Mondo” Duplantis, un garrochista que parece competir contra las leyes de la física y, de paso, contra sí mismo. A sus 25 años, el sueco-estadounidense no solo domina el salto con garrocha; lo está redefiniendo, como si cada récord mundial fuera un lienzo en blanco donde pinta su legado. El 28 de febrero de 2025, en Clermont-Ferrand, voló a 6.27 metros, su undécima marca mundial, y mientras el mundo aplaudía, él sonreía como diciendo:
“Esto es solo el calentamiento”
Un niño con alas en el patio trasero
Nacido el 10 de noviembre de 1999 en Lafayette, Louisiana, “Mondo” no llegó al atletismo por casualidad; lo llevaba en la sangre. Su padre, Greg, un ex garrochista de 5.80 metros, y su madre, Helena Hedlund, heptatleta y voleibolista sueca, convirtieron su infancia en un campo de pruebas. A los cuatro años ya brincaba con una garrocha en el patio trasero; a los siete, rompía récords mundiales de su edad.
“Siempre supe que esto era lo mío”
Y no es broma, a los 15 ganó el Mundial Juvenil de 2015 con un salto que ya olía a grandeza. Mientras otros adolescentes jugaban videojuegos, él jugaba a volar.
Optó por Suecia sobre Estados Unidos, una decisión que mezcla raíces maternas y un instinto astuto, en Europa, el salto con garrocha tiene un aura mítica que “Mondo” ha sabido explotar. Pero no te equivoques, esto no es solo talento bruto; es obsesión y ciencia. Entrenado por sus padres, su técnica es un ballet calculado, una mezcla de velocidad, fuerza y un desprecio casi insolente por la gravedad.
Los récords: Una escalera al infinito
Duplantis no rompe récords; los colecciona como trofeos en una vitrina que no para de crecer. Desde que destronó a Renaud Lavillenie (6.16 m) en 2020, ha elevado la barra 11 veces. Aquí va la lista, cada salto un capítulo de su saga:
- 6.17 m – 8 de febrero de 2020, Toruń, Polonia: A los 20 años, le quitó el récord a su ídolo Lavillenie con una frialdad que heló la pista.
- 6.18 m – 15 de febrero de 2020, Glasgow, Escocia: Una semana después, un centímetro más, como si fuera un juego.
- 6.19 m – 7 de marzo de 2022, Belgrado, Serbia: Indoor, bajo techo, demostrando que no necesita el cielo abierto para brillar.
- 6.20 m – 20 de marzo de 2022, Belgrado, Serbia: Otra vez, apenas 13 días después, ¿por qué parar?.
- 6.21 m – 24 de julio de 2022, Eugene, EE. UU.: Mundial al aire libre, su primer oro grande y un récord para sellarlo.
- 6.22 m – 25 de febrero de 2023, Clermont-Ferrand, Francia: Indoor otra vez, un salto que parecía rutina.
- 6.23 m – 17 de septiembre de 2023, Eugene, EE. UU.: En la Diamond League, un guiño a su tierra natal.
- 6.24 m – 20 de abril de 2024, Xiamen, China: Su primer aire libre del año, un aviso al mundo.
- 6.25 m – 5 de agosto de 2024, París, Francia: Oro olímpico en París 2024, con el Stade de France como testigo de su épica.
- 6.26 m – 25 de agosto de 2024, Chorzow, Polonia: Diamond League, 20 días después de París, porque descansar no es su estilo.
- 6.27 m – 28 de febrero de 2025, Clermont-Ferrand, Francia: Indoor, con su single “Bop” sonando, un salto que fue arte y rock al mismo tiempo.
Once récords en cinco años. Nadie en la historia ha subido tanto, tan rápido. Sergey Bubka, con 17 marcas mundiales, tardó décadas; Duplantis lo hace en un parpadeo.
Más que centímetros, títulos y dominio
No todo es altura. Duplantis acumula medallas como si fueran recuerdos de viaje: oro olímpico en Tokio 2020 (6.02 m) y París 2024 (6.25 m), dos mundiales al aire libre (2022, 2023), dos indoor (2022, 2024), tres europeos (2018, 2022, 2024), y cuatro Diamond League consecutivas (2021-2024). Su única “derrota” reciente fue un plata en Doha 2019, y desde entonces, ha sido intocable. Ha superado los 6 metros más de 26 veces, un club exclusivo donde él es el único socio activo.
¿Es demasiado perfecto?. Su dominio roza lo aburrido para algunos. En París 2024, mientras Sam Kendricks (5.95 m) y Emmanouil Karalis (5.90 m) peleaban por el podio,
“Mondo” ya estaba en otra galaxia, saltando por récords mientras otros solo soñaban con medallas.
“Quiero que el público vea lo que es posible”
Pero a veces parece competir en una pista vacía, contra sombras que no existen.
El toque humano: Música, amor y un futuro abierto
Fuera de la garrocha, Armand Duplantis es más que un robot de récords. El 28 de febrero de 2025, mientras saltaba 6.27 metros, su primer single “Bop” sonaba en Clermont-Ferrand.
“Pensé que sería raro saltar con mi voz, pero me puso en el mood”
Confesó, riendo. Es un guiño a su lado relajado, un contraste con la máquina que vemos en la pista. Vive entre Baton Rouge y Uppsala con Desire Inglander, su prometida desde octubre de 2024, una modelo sueca que lo ancla entre tanto vuelo.
¿Y el límite?. A sus 25 años, con un físico intacto y una mente hambrienta, los 6.35 metros que algunos predicen no suenan descabellados. “Siempre hay mariposas en el estómago antes de saltar”, admite, y esa chispa lo mantiene humano. Pero también hay presión, ser el mejor de todos los tiempos no es solo saltar alto, es no caer nunca. Por ahora, cada récord es un ladrillo en un legado que ya pesa toneladas.
Armand Duplantis no es solo un atleta; es un statement. Sus 11 récords mundiales, desde 6.17 hasta 6.27 metros, son escalones hacia un horizonte que él mismo dibuja.
Él siempre compite contra lo que creíamos imposible. Pero mientras sube, nos hace preguntarnos si algún día tocará techo o si, como Ícaro, volará demasiado cerca del sol.
Por ahora, “Mondo” no tiene alas de cera; las suyas son de acero, y el cielo sigue siendo su patio trasero.