En la Gran Vía madrileña, donde el bullicio de la ciudad se mezcla con el eco de los pasos firmes, México resonó con fuerza el 1 de junio de 2025. Alegna González, la marchista chihuahuense de 26 años, se coronó en el IV Gran Premio Internacional Madrid Marcha Silbö Telecom, conquistando los 10 kilómetros con un tiempo de 43:06 minutos. No fue solo una victoria: fue un hito. Su crono no solo le valió el oro, sino que estableció la mejor marca mundial del año en la distancia, según World Athletics, superando el registro previo de 44:16 de la serbia Mina Stanković.
Bajo el sol abrasador de Madrid, con 26 °C y miles de espectadores ovacionando, Alegna dominó desde la primera zancada en el circuito urbano de un kilómetro. Dejó atrás a rivales de élite como la peruana Evelyn Inga (43:51) y la china Peng Li (43:55), demostrando que su ritmo es tan implacable como su ambición. “Ganar en Madrid es algo increíble. Es una de mis competiciones favoritas del mundo. Aquí siempre hay mucha gente apoyando y el circuito de la Gran Vía es espectacular”, declaró la atleta, con la bandera mexicana sobre los hombros, al cruzar la meta.
¿Quién es Alegna González?
Nacida el 7 de enero de 1999 en Ojinaga, Chihuahua, Alegna Aryday González Muñoz creció en un entorno donde el desierto marca el carácter. Su nombre, un anagrama de Ángela, refleja la originalidad que lleva dentro y fuera de la pista. Desde niña, retaba a los chicos en carreritas, mostrando una competitividad que la llevaría lejos. A los 17 años, dejó su hogar para entrenar en la Ciudad de México, superando la resistencia de su madre, quien finalmente la acompañó en ese salto hacia su sueño.
Alegna es más que una atleta; es un símbolo de resiliencia. Licenciada en Ciencias del Deporte y cabo de las Fuerzas Armadas mexicanas, combina disciplina militar con una pasión que la ha convertido en un ícono del atletismo. Apodada “La Bella Durmiente” por su amor por dormir, no hay nada de letargo en su andar: cada paso es un desafío al status quo.
Una trayectoria de oro
El camino de Alegna hacia la cima ha sido meteórico. En 2018, a los 19 años, se coronó campeona mundial sub-20 en los 10,000 metros marcha en Tampere, Finlandia, y ganó el oro en el Campeonato Mundial de Marcha por Equipos en Taicang, China. Ese mismo año, recibió el Premio Nacional del Deporte, consolidándose como una promesa cumplida.
Su debut olímpico en Tokio 2020 fue un mensaje al mundo: terminó quinta en los 20 km con un tiempo de 1:30:33, a menos de dos minutos del podio. En París 2024, repitió el quinto lugar en los 20 km (1:27:14) y, junto a Ever Palma, logró otro quinto puesto en la novedosa prueba de relevos mixtos, destacando por remontar del puesto 13 al 3 en su tramo.
En 2023, aseguró su boleto a París con un tiempo de 1:28:09 en el “Dudinska 50” en Eslovaquia, y cerró el año como la segunda mejor del mundo en el Tour Mundial de Marcha Atlética de World Athletics. En abril de 2025, en los Penn Relays, pulverizó su propio récord mexicano en los 5 km con 21:22.66, colocándose como la cuarta mejor marca mundial en esa distancia.
El impacto de Alegna en la marcha mexicana
México tiene una rica tradición en la marcha atlética, con 10 medallas olímpicas, pero solo una conseguida por una mujer: la plata de Lupita González en Río 2016. Alegna está llamada a ser la heredera de esa legado, pero con un estilo propio. Su versatilidad para competir en 5, 10 y 20 km, junto con su capacidad para adaptarse a los cambios en las distancias de la marcha (como la reciente inclusión de los 35 km), la posiciona como una figura clave para el futuro.
“Quiero estar en la historia mexicana de los Juegos Olímpicos”, afirmó tras su actuación en París 2024. Con su triunfo en Madrid, Alegna no solo se consolida como una de las favoritas para el Campeonato Mundial de Atletismo 2025 en Tokio, sino que también pone la mira en Los Ángeles 2028, donde sueña con una medalla que la inmortalice.
Un triunfo que inspira
El oro de Alegna en Madrid no fue solo suyo. México celebró también el bronce de Ricardo Ortiz en la rama varonil (38:59) y el quinto lugar de Ilse Guerrero (44:32), reafirmando la fortaleza de la marcha mexicana.. El evento, que homenajeó a la española María Vasco por su bronce olímpico en Sídney 2000, fue un escenario perfecto para que Alegna brillara ante 11,000 espectadores.
“Sabía que con este ritmo iba a salir algo grande; Alegna está intratable”, dijo Diego García Carrera, organizador del evento y ex subcampeón europeo.. Su victoria no solo es un logro técnico, sino un testimonio de su mentalidad: tras superar un desgarro abdominal en 2025, regresó más fuerte, demostrando que las adversidades solo afinan su determinación.
Rumbo a Tokio y más allá
Con un tiempo que asegura su boleto al Mundial de Tokio 2025 (13-21 de septiembre), donde el estándar para los 20 km es 1:29:20, Alegna ya planea su próximo desafío: el Gran Premio Cantonés en La Coruña, donde competirá en los 20 km como preparación final.. Su mirada, sin embargo, está fija en Los Ángeles 2028. “Soy muy competitiva y sé que no me voy a ir sin mi medalla”, aseguró.
Alegna González no solo marcha; inspira. Entre su amor por los Takis picosos y su sueño de compartir una carnita asada con su familia, lleva el orgullo de Ojinaga y de México en cada paso. Su oro en Madrid es un recordatorio: el futuro de la marcha mexicana tiene un nombre, y ese nombre es Alegna.