En un giro que ha sacudido los cimientos del fútbol mexicano, Guillermo Almada, el estratega uruguayo que llevó a Pachuca a nuevas alturas, presentó su renuncia el pasado 22 de mayo de 2025, a tan solo tres semanas del arranque del Mundial de Clubes. Sí, leíste bien: el hombre que clasificó a los Tuzos para enfrentar a titanes como Real Madrid, Al Hilal y RB Salzburg en el torneo internacional más esperado del año, no estará en el banquillo.
El motivo de la renuncia
La salida de Almada tiene raíces en un conflicto interno que refleja los problemas estructurales del fútbol mexicano. Almada sugirió concentrar a sus jugadores tras lo que él consideraba unas “cortas” vacaciones post-temporada, una medida que buscaba poner al equipo en óptimas condiciones para el Mundial de Clubes. Sin embargo, los futbolistas, agotados por el calendario apretado y el poco tiempo de descanso, mostraron su descontento. A esto se sumó un hartazgo generalizado con la metodología intensa de Almada, conocida por sus sesiones triples de entrenamiento y su enfoque obsesivo en los detalles tácticos.
El ultimátum de Almada fue claro: “Si no es así, me voy, renuncio”. Y así lo hizo. En un mensaje directo a la plantilla, el DT uruguayo añadió: “Si gustan, me puedo quedar hasta que encuentren otro DT, pero conmigo no cuenten en el Mundial de Clubes”. Palabras duras que reflejan su frustración, pero también su integridad. Almada no estaba dispuesto a ceder en su visión de trabajo, aunque eso significara dejar atrás un proyecto que él mismo había elevado a niveles históricos.
El legado de Almada en Pachuca
Guillermo Almada llegó a Pachuca en abril de 2022, tras un exitoso paso por Santos Laguna, y desde el primer día dejó claro que su objetivo no era solo ganar títulos, sino construir un legado. Y vaya que lo logró. Bajo su mando, los Tuzos conquistaron el Torneo Apertura 2022 de la Liga MX, venciendo a Toluca en una final que demostró el estilo dinámico y ofensivo que Almada imprimió al equipo: un fútbol basado en la posesión, la presión alta y la integración de jóvenes talentos.
Pero el mayor hito de su gestión llegó en 2024, cuando Pachuca se coronó campeón de la CONCACAF Champions Cup, un título que no solo les dio el boleto al Mundial de Clubes 2025, sino que reafirmó el estatus del club como un referente en la región. En la final, los Tuzos aplastaron al Columbus Crew de la MLS con un contundente 3-0, con goles de Salomón Rondón y Emilio Rodríguez, dos jugadores que brillaron bajo las órdenes de Almada.
Más allá de los trofeos, Almada será recordado en Pachuca por su apuesta por la cantera. Durante su gestión, talentos como Luis Chávez, quien hoy milita en el Dinamo de Moscú y es un pilar de la Selección Mexicana, y Kevin Álvarez, lateral derecho que brilla en el América, dieron el salto al estrellato. Almada no solo les dio minutos, sino que los moldeó con su filosofía de juego: intensidad, disciplina y un enfoque colectivo que priorizaba el equipo sobre las individualidades.
Un estilo que divide: táctica genial, pero exigencia al límite
El sello de Almada siempre fue su enfoque táctico. Inspirado en técnicos como Marcelo Bielsa, el uruguayo implementó un sistema de juego basado en la presión alta, transiciones rápidas y una posesión efectiva. En Pachuca, sus equipos promediaron un 55% de posesión por partido en la Liga MX durante su etapa y fueron líderes en recuperaciones en campo rival, con un promedio de 12 por encuentro. Pero este estilo, aunque vistoso, tiene un costo: exige un nivel de condición física y mental que no todos los jugadores están dispuestos a asumir.
Aquí es donde entra el conflicto que derivó en su salida. Los futbolistas de Pachuca, muchos de ellos acostumbrados a un fútbol mexicano donde el descanso y las “divas” suelen pesar más que la disciplina, no estaban listos para el ritmo que Almada demandaba. Mientras en Europa los calendarios apretados son la norma, en México la mentalidad de algunos jugadores sigue siendo un obstáculo para el crecimiento.
¿Qué sigue para Almada y Pachuca?
La salida de Almada no será sencilla para Pachuca. Según un artículo de ESPN, el club hidalguense no ha aceptado oficialmente la renuncia debido a una cláusula de rescisión en el contrato de Almada, que se extiende hasta diciembre de 2026. Esto significa que cualquier equipo interesado en el uruguayo, como Cruz Azul, que ya suena como su próximo destino, deberá pagar una compensación económica. Mientras tanto, Gabriel Caballero tomará las riendas del equipo de forma interina para enfrentar el Mundial de Clubes, un torneo que arranca en menos de un mes y donde Pachuca se medirá a rivales de la talla de Real Madrid.
Un adiós que duele, pero una herencia eterna
La partida de Guillermo Almada deja un vacío en Pachuca, pero también un legado que será difícil de borrar. Este es el hombre que les dio un título de Liga MX, un cetro continental y un boleto al Mundial de Clubes. Es el técnico que creyó en los jóvenes y les enseñó que el trabajo duro puede llevarlos a competir contra los mejores del mundo. Pero también es un recordatorio de los retos que enfrenta el fútbol mexicano: una mentalidad que a veces prioriza la comodidad sobre la ambición.
Mientras los Tuzos se preparan para el Mundial de Clubes sin su guía, los aficionados no pueden evitar sentir una mezcla de tristeza y gratitud. Almada se va, pero su huella queda grabada en el Estadio Hidalgo y en cada sueño que Pachuca persiga en el escenario mundial.